TERCAMENTE CURIOSO O CURIOSAMENTE TERCO

No sé por donde empezar, este es un breve relato de como mis ojos ven las cosas. No hay nombres porque no son lo importante aquí, las emociones arrasan con todo y ellas son las que inventaron esta historia.

Por mi cabeza pasaron varias cosas, ideas y formas, no sabía si llamar y decirle que iba de una vez o mejor me quedaba encerrado en mi cuarto jugando play… también tenía la posibilidad de ir a tomar (algo muy normal en la rutina del fin de semana) pero no era lo que necesitaba, quería estar con ella sin tener alguna idea clara en la cabeza, buscaba conocerla, tal vez saber de sus gustos o quizás escucharla. Sin saber cómo y por qué, agarré mi bicicleta y fuí rumbo a su casa, no había motivos pero si pretextos – ayudarla con su trabajo final – o al menos eso creía, fue por esa razón que mastiqué mucho la idea de ir, iba a verla sin tener algo preparado (hay muchas cosas que no entiendo en ella y creo que eso me agrada) me llamaba la atención y eso por el momento era mi mejor argumento… sea lo que sea ya estaba rumbo al encuentro de esa noche.

Llegué, nos miramos, actuamos como si nada estuviera pasando e hicimos de su sala nuestro restaurant elegante (imaginemos que es uno de… ya que son sus favoritas)  conversamos como si vernos en la madrugada fuera de lo más normal, como si estar juntos  fuera parte de una rutina ya muy practicada y así los complejos y las curiosidades empezaron a abrirse paso. Fuí yo quien empezó con las manifestaciones de sinceridad tal vez nunca debí confesarle que me moría por conocerla… o ¿sí?, en fin ella o mejor dicho sus respuestas me hicieron ver que andaba equivocado en muchos aspectos, ahora resulta que si tiene corazón y no era tan fría como imaginé, nunca intento chotearme cuando la invité a salir hace ya un par de meses y descubrí que congeniamos en muchas cosas, ideas y formas, encontré esto último muy curioso. Algo que ayudó con el transcurrir de las horas fue el sutil interés que mostró por mí (al menos este ego enfermizo quiso verlo así) supongo que eso fue bueno, probablemente, soy su invitado tiene que mostrar algún interés por cortesía. Entre construir ideas, tomar café, y al final fumar unos cigarros pasó la primera noche entre nosotros. ¿Clara? No lo sé… me encanto conocer algo más y por cierto que linda se ve cuando está muy cansada, ella posee una belleza natural, transmite inteligencia paciencia e ironía y todo con una pisca de ternura. Llegué a mi casa con ganas de volver, con la curiosidad de saber si esto era compartido, espero al menos que se haya sentido cómoda y desee volver a verme….

Al día siguiente regresé algo más decidido, había disfrutado mucho la noche anterior tratando de ser útil, era su trabajo final y estaba ahí para ayudar aunque pareciese todo lo contrario, me sentía más tranquilo y relajado mucho mejor aún si era rodeado de un buen clima: música, silencio, café y por sobre todo nuevamente ella… (Más cansada y ojerosa pero linda al fin y al cabo) volvimos a caer en largas y profundas conversaciones, poco a poco empecé a dejar que me conozca y eso no es algo fácil, para nadie es fácil, me quité las máscaras y actué  de manera mas sencilla y honesta pues ella me daba confianza. Hubo más sinceridad y comunicación de parte de los dos. Otro punto  fue su música (que por cierto me atrapo) dice mucho y el sonido también es acogedor hasta podría decir que esas canciones son como ella, define y se mescla mucho con cada parte de su rostro, gestos y maneras de pensar, tiene tacto y mucho respeto, admiro su capacidad de estar bien solo con ella sin exageraciones, sin actuaciones. Es un corazón libre, no pierde la esencia de su pureza y a la vez se adapta a los cambios que se suponen son para bien.

De ahí vinieron cosas interesantes pero que en esencia fue más de lo hermoso que tuvimos y compartimos juntos este fin de semana, desayunamos, me sentí muy cómodo y creo que ella también… seguimos avanzando en su trabajo final… nos reímos mucho… nos prometimos frecuentarnos más seguido… miradas van miradas vienen… la final del mundial, todo absolutamente todo fue pleno.

Bien, salí de su casa con ideas algo claras y mientras caminaba por un momento sentí felicidad, ya no le tenía miedo eso se transformo en confianza, ya no la sentía difícil o complicada. Ella no es tan extraña es un ser diferente, lo digo no solo por ese don que le atribuyen, sino también por el tipo de su belleza, de líneas austeras, y no ajenas de un toque exótico. Y por su amor a la soledad – orgullosa y obstinada soledad – por la serena fuerza que irradia y por su afición…por la reserva con que se dedica como modo de vida a su carrera, si por todo ello y por su nombre… en fin porque es así como la concibo y ahora la entiendo.

Poco a poco se que esto puede mejorar o tal vez desaparecer como tantas cosas en mi vida, ¿qué hará que sea diferente?, la verdad no lo sé… ojala se dé cuenta que no suelo perder mi tiempo… es más suelo ganarlo siendo muy feliz y ella sin querer o quizás ¡sí! queriendo me está haciendo muy feliz… y esto me pareció una buena excusa para escribir.